¡ Cómo pasa el tiempo!
El pobrecito mío siempre tiene que esperar unos días para celebrarlo, claro que si hubiese nacido cuando le tocaba y no dando la nota cómo lo hizo, otro gallo cantaría jajajaja.
El caso es que le tengo un pelín mal acostumbrado y cuando llega el momento de hacer una tarta empieza a pedir personajes por esa boquita y no hay quien le pare.
Primero fue Toy Story, luego Rayo Mcqueen, después Los Pitufos y la última ocurrencia fue Peppa Pig, unos dibujos horribles a los que me negué en redondo.
De todas las peticiones la que más me gustó fue la de los Pitufos me parecen unos personajes muy dulces y seguramente éste será el último año que quiera algo así antes de que nos invadan gormittis, pokemons y demás basuras.
Eso sí los muñequitos comprados porque todavía no me lanzo a modelar, lo sé un día de éstos tengo que ponerme...
La tarta es un bizcocho de yogur y almendra bañado de almíbar de vainilla, el relleno es un Swiss Meringue Buttercream de toffee de limón, las setas están hechas con masa para bizcobolas y cubiertas de fondant.
De todo os iré poniendo las recetas, sobre todo de la crema del relleno, qué cosa más rica...
Aquí tenéis un trocito, podéis serviros.
Santa paciencia!!!!
ResponderEliminarYo ni en mil años.
Es preciosa ;)
¿paciencia? ¿y me lo dices tú con la maravilla de galletas que haces? seguro que si te pones haces cosas mejores. Muchas gracias, un beso.
ResponderEliminarTe ha quedado preciosa! A mí marido le encantan los pitufos así que no descarto hacer una tarta pitufa algún día :)
ResponderEliminara mi madre le gusta las tartas de pitufos
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